octubre 30, 2013

Al que llora

Al que llora
Le robamos
La sequedad
y otro poco de ninguna
limosna le pusimos
en la humedad


Daniel Battilana





Dar la fruta


Para matar lo bueno
que no conoce el afuera
saqueamos el níspero

o nos da la fruta
o le fecundamos la libertad

Daniel Battilana

octubre 20, 2013

1

"Ya se había desvestido la espada
                        y la mujer para ella"

Daniel Battilana (Fragmentos sanos)

octubre 18, 2013

Se gastan los animales


Se gastan los animales
me gasto yo que como
se gasta el mundo
lento de lentitud invisible
se gastan los árboles
deshilachados
se gastan los pajaritos
frotándose las alas
se gastan los que trabajan
y los trabajados se gastan
se gasta el aire
visitando pulmones
afino el cuerpo
para entrar mejor
donde me esperan
se gastan los poemas
dilapidando poetas
se gastan los sentidos
y los animales del sentido
se gasta el sol
que es una madre caliente
no es suficiente la palabra gastar
en un momento en que
lo nuevo es primicia de lo viejo
se gastan las traducciones realistas

lo que no se gasta se contempla con tus ojos

te gasto yo a vos frotándote
frunciéndote y que quepas
en un bolsillo de amor
se gasta el olvido
para no poder volver
se gastó eso
que me hizo enredar
se gastó el niño

gastan los animales
a sus mascotas.





Daniel Battilana

octubre 15, 2013

Drogar el ojo

DROGAR EL OJO

Como llenaba mi inteligencia de noches:
que la estética nos degrada: el insistir nos agrega: La escasa solidez te crea un vacío tal que parece grandeza lo que cabe y lo que sobra: que el vacío se hace cercano cuando se completa:

Los viejos amigos envejecen añejadores nuestros, conservan un problema contado hace veinticinco olvidos. Envejecen como estanques, es inútil, no envejece el agua:.

Meter el brazo y sacar de los intactos y las abandonadas metal foras; no es mi mansa analizar cuán jóvenes son por el tun tun del abismo: cuán épico me planto frente a Arjuna todos los días leo un episodio anal contra el combate:

Para la honestidad una ropa, o Goethe: “El hombre, consumido por los cuidados, sembró siempre la vanidad, y alcanzó la desesperación”. Esa ropa desesperada es el afuera.

Podría decir montones de cosas que no encontró Lubbock, no encontró Castelar, no supuso Ramos Mejía, entonces las señoras llenarán las tiendas de surtidos libros, de surtidos. De espejismos surtidos aplicables a la resurrección y desvalidéz.

Me alejo de los puntos principales cuando dice Madame de Sevigné “Qué perfecta mujer llegaría a ser yo viviendo dos siglos”. Él se contentaría con mis puntos principales si me leyera escribir:

“No vivo sin morir/no vivo tanto/como pueda la muerte/despreciado por los libros/guardo mis hojas/¿No vivo sin morir?/¿No vivo tanto/¿No vivo aquí el morir?

¿Ves Montaigne, ves al Teórico de departamento? Navegar mis entredichos, te digo Montaigne, esto que no se te ocurrió: “Hablar es un recurso tomado del grito, el habla es grito esclavizado”.

Nos encontramos en lo pequeño que se mueve en la duración, en lo mal dicho gracias al poder salvífico de mi esencialismo poético.

¿Ves poeta aristócrata Americano?

La disimulación es deshonesta, nada te honesta.


Cuando me leen se comen, son felices traicionando su alimento.


Al hombre que sabe abrir las piernas se le sale caminando el perdón o pasa un siervo y se le cae la escoba de otro siervo, tengo muchos modos de destrucción apilados o en portafolios.

No he mirado tanto en lo que escribo que el don tranquilizador de este ejercicio de bestias, no ver los escobazos de las plantas contra los insectos eso era todo escarmiento tanto enigma.

Sanar es dejar de ver la geometría de las bolsas y deslizado en ese quicio de brea

me siento redondeado por mi infancia; palabras esclavizadas ya di para que mueran las esperanzas: el sentido me soltó su infinito como mamá que ya no me abraza.

Tu medusa silvestre de rayos me enfrió el pedestal de la norma.

Nada de eso de conmover o ser conmovido por tu rayo, hacia los incompletos retornos va mi ojo drogado de motivos.

Drogado de palabra el ojo que no deja ver los elásticos confines.

Drogar el ojo

(Daniel Battilana. Inédito)

octubre 12, 2013

Antes del dolor


Antes del dolor
la tristeza era nuestra

Antes de la luz
la oscuridad
no nos sabía

la luz
para todo lo nuestro
no tiene reparo

por donde llego
no te agazapás
por donde llego

antes del dolor
la tristeza era nuestra





Daniel Battilana

A tenerla


Te prometí sudar en el ariete
una ostia de jengibre cubre mi avería
ni paladar ni un grosor aquí
más que de un alga babosa
y velada de hábitos
Loca en tu sartén
saltando en la billetera negra de la vida
todos anclados a la almohada del sueño
Toso en el toro inverso de tu sol
Recicla su joroba
la playa de tu cuerpo
Cruzo lo eterno
en un bondi de carne
desciendo en la esquina
y si no para me demoro muerto
convoqué a mis modestas latitudes
tus moléculas, ah, esa piedad de verte
el adiós fosforado de lo inquieto
el complicado hombro que soy
por lo tuyo delicado es la cápsula
imitar el cuerpo al escribir
fallará mucho la espina
sin lo espinoso enfrente
o esa angustia que sirve en los poros manjares serosos
parto esa meditación
que se hace médano en mi escombro
en ese orante hay un templo genital
uno que reza es uno frito en el agobio
otra vez la marcha
el cuerpo reclutado
¡A tenerla, a tenerla!
No, no eran gritando pajaritos
redondeándose contra la tierra


reciclo mi joroba
y me viajás
como víctima


Daniel Battilana




Yo


Yo,
el menor de tus manjares
Lacas,
de tus manjares, yo
Migas,
el mayor de mis manjares
Vos,
el mayor de mis manjares.



Daniel Battilana

octubre 03, 2013

Un arrecife

Con todas esas espinas
¿te duele el pez, mar?

Con toda esa sal
¿no te arde pez, el mar?

¿Qué tenés adentro?
Un arrecife
un arrecife de huesos
en un mar de sangre
un arrecife tenés adentro
sin peces
un arrecife cuyo esqueleto
creció enpujando tu muralla
encallado todo
un arrecife hundido en la carne.

Daniel Battilana

octubre 02, 2013

Se agitan


El agua tallada por los peces
el agua golpeada sin los peces

el agua tallada por los golpes a los peces
el agua caminada por los peces

por los golpes a los peces
el agua de los peces

por los golpes al agua
caminan los peces

por tallar el agua
se agitan.


Daniel Battilana