julio 23, 2010

La esperanza de perfección inmoviliza.

 

Fundemos lo breve

hecho del reparto humano

de la prolijidad más posible.

 

El órgano plano

mis ojos que se llevaron tantos cuerpos

bordes que me sostienen.

 

Vistamos la piel

que nos retira de la mirada incompleta

que sólo nos ausenta

hasta que partamos.

 

La moneda herida de no poder quedar

fijado en los rituales que regeneran,

leer en los días el miramiento

que la solitaria escama protege del riesgo

de someter el tiempo a los deseos.

 

La masa heroica

que no pudo engañar el corazón.

 

 

Daniel Battilana (Inédito)

2 comentarios:

antonio medinilla dijo...

Magnífico texto, Don Daniel, conceptual, de extrañas y sugerentes amplitudes. En fin, mis felicitaciones, y un placer ver este blog reluciente.

Mónica Angelino dijo...

Adhiero a las palabras de Antonio.

Besossssssssss